Una videoinstalación da la bienvenida a la sala, se compone por un televisor rodeado de tiernos muñequitos vintage y una carpeta tejida que nos recuerda a la casa de la tía (todos conocemos a alguna así). La atención entonces vira hacia el video reproducido en el televisor. What?
Tomas cortas en loop de explícitas escenas homoeróticas con textos sobrepuestos: “Toma Uno, Toma Dos, Pon Tres, Todos Ponen”, frases que nos recuerdan al tradicional juego de la pirinola y a nuestras tardes de ocio en la niñez. Entonces desconocíamos del amor como concepto y vivíamos a la merced del azar. Si éste se define como el encuentro de una causalidad externa y una finalidad interna, según André Bretón, entonces: ¿Qué tanto las circunstancias sociohistóricas moldean nuestros deseos si somos tan solo la expresión de aquello que deseamos? Is
Es importante reparar en los juguetes-esculturas, cuyo significante se separa de la inocencia, para mezclarse con el tono elevado de las ilustraciones dispuestas a muro. Los gestos infantiles de muñecos vintage: Kewpies, Scootles, Rushton Bears y Mickey Mouse, contrastan con la representación de relaciones tóxicas, discriminación y prácticas consideradas tabú en relaciones entre personas del mismo sexo. Aspectos abordados desde una perspectiva queer, pero que permean también en cualquier clase de relación afectiva, como la normalización de prácticas violentas en relaciones de poder bajo una idea anticuada del amor romantizado. Love
Descapitalizar el sexo, desentrañar los núcleos del amor monogámico, hacer visibles y naturalizar las prácticas destinadas al goce sexual, son algunas de las reflexiones a las que invita esta divertida e irónica instalación. – Tetrade